domingo, 20 de julio de 2014

OCULTACIÓN DE UN NUEVO ACCIDENTE EN UNAS OBRAS DE LA DIPUTACIÓN DE GIPUZKOA


MÁS DE LO MISMO...lo que empieza mal termina mal

Accidente del 23 de junio en las obras de DESKARGA
Obras de DESKARGA / UTE LAPATZA
Obra promovida por la Diputación Foral de Gipuzkoa

ELA ya ha venido manifestando con rotundidad que la única forma real y eficiente de controlar y, en su caso, evitar la concatenación de gravísimos incidentes de siniestralidad laboral en esta y otras obras públicas es la presencia física a pié de obra de todos los agentes interesados en acabar con este drama. Si esto no se hace así, los intereses económicos suelen prevalecer sobre criterios éticos, morales e, incluso, sobre la mismísima legalidad vigente. También hemos sido muy insistentes en explicar que el brutal abaratamiento del precio final al que habitualmente se adjudican estas obras (37% menor en este caso) es el caldo de cultivo ideal para que el “ahorro” repercuta finalmente donde nunca debiera, es decir, en la seguridad y condiciones sociolaborales de sus trabajadores.

Ya sucedió esto, en su grado más extremo, con el trabajador Iñaki Alkorta Retegi, fallecido el pasado 18 de septiembre de de 2013. Tanto Inspección de Trabajo como OSALAN determinaron sin ambigüedad alguna “claros indicios de criminalidad” en ello. Ante esta evidencia, la Diputación Foral de Gipuzkoa reaccionó con lo que se presentó a los medios como una “multa ejemplar”....que sin embargo se limitó al mínimo del 4%, frente al 10% que la legalidad le posibilitaba para un hecho presuntamente “criminal” como el citado.

Este tipo de circunstancias (barato-barato, multas mínimas, falta de control institucional a pié de obra...) sigue proporcionando hechos como el que pasamos a relatar:

OCULTACIÓN DE UN ACCIDENTE

El pasado 23 de junio, sobre las 18:30h. y en esta misma obra, se produce un accidente donde un trabajador de la subcontrata FERPI que conducía un camión lagarto similar al del difunto Iñaki Alkorta, resbaló debido a la lluvia. El operario, tras perder el control del mismo, decidió saltar y en el salto fue alcanzado y golpeado por la parte trasera del camión, lesionándose en la espalda y en una pierna. El lagarto terminó volcado en una zona boscosa. Sin embargo, esto no es ni de lejos lo más grave del hecho. No, lo más grave fue que tanto el accidente como sus circunstancias fueron ocultadas desde la empresa con premeditación y alevosía, no sólo ante Inspección de Trabajo u OSALAN, sino incluso a las unidades de ERTZAINTZA, Bomberos y Ambulancias que se personaron en  el lugar de los hechos tras la llamada al 112 de un testigo ajeno a la obra. Se mintió miserablemente y, a causa de ello, los dispositivos de emergencia se tuvieron que dar la vuelta como si no hubiera pasado nada y sin atender al herido por la ocultación citada. Un hecho muy grave que, con las pruebas y denuncia aportadas por este Sindicato, se encuentra en fase de diligencias.

De cómo están las cosas en el seno de algunas empresas a la hora de reaccionar frente a la evidencia de los hechos da idea de cómo se ha hecho en este caso: “presión a los trabajadores y sobre todo a nuestros delegados sindicales sobre “las consecuencias” que para las empresas que conforman la UTE puede tener el “férreo” control de nuestro Sindicato en estas básicas cuestiones de Seguridad Laboral y “recordatorio” de que cuidado con lo que se hace.” En ELA estamos valorando la posibilidad de denunciar como “acoso sindical” este tipo de reacción.

Todo ello nos llevó a solicitar una reunión “urgente” el pasado 7 de julio con la Diputada Foral de Infraestructuras, Larraitz Ugarte. Siempre, en base a nuestro firme compromiso de seguir informando a todos los niveles administrativos e institucionales de este tipo de “incidentes” cuando se produzcan. A día de hoy 19 de julio y tras seguir dándosenos largas, todavía no hemos logrado ser recibidos y ni siquiera llamados al respecto. Resulta obvio que la tozuda constatación de la terrible realidad que sigue aconteciendo en esta obra no encaja adecuadamente con la propaganda “triunfalista” emitida desde Diputación (multas supuestamente “ejemplares”, compromisos de control....). En definitiva, la táctica del avestruz nuevamente.....y a esperar que “escampe”. El problema es que para la familia de Iñaki Alkorta ya no “escampará” jamás. Afortunadamente, en el caso que ahora nos ocupa y merced a nuestras pruebas y denuncia, la pierna “anónima” y “oculta” de último accidentado podrá ser “aflorada” y contabilizada como una siniestra “muesca” oficial más de este insoportable listado.

No es cuestión de mala suerte y para ello no hay más que ver las continuas incidencias que desde ELA hemos venido registrando durante este mismo mes de julio y que han provocado la paralización por parte de Inspección durante la semana pasada de los trabajos de una parte de la obra. ¿Motivo?: incumplimiento de las normas de seguridad con riesgo de accidente (la parte de la escollera en Antzuola). El inspector no dudó, tras la denuncia de ELA, en paralizar ese trabajo y requirió a la UTE un plan de trabajo adecuado a las normas de seguridad.

Hay más: este pasado 14 de julio, sobre el mediodía, se ha venido abajo un talud, llegando a atrapar en su desprendimiento a una excavadora. La fortuna se alió esta vez con el operario, que en el momento de los hechos se encontraba tomando un café en su descanso correspondiente. Buena suerte, sí....pero ¿hasta cuándo?.

Para ELA, la única Comisión de Seguimiento REAL Y EFECTIVA que puede poner freno a esta sangría sigue siendo la de siempre, la del Sindicato de clase al uso, es decir, la presencia física a pie de obra. No es fácil y, como vemos, gusta más bien poco a empresas e instituciones, orientadas unas  

a conseguir el máximo beneficio  y, otras, a intentar disimular las consecuencias de esta macabra estrategia del barato-barato tan firmemente arraigada en la obra pública.

Más noticias relacionadas
Dos sustos de muerte (Noticias de Gipuzkoa 20/VII/2014)